Cinco detenidos en una operación antiterrorista de la Ertzaintza
Nuevo golpe a ETA. La Ertzaintza ha dirigido en la madrugada de este martes una operación contra la banda terrorista en la que ha detenido a cinco personas en Vizcaya y Guipúzcoa que formarían un grupo 'legal' (de miembros no fichados) de ETA.
Fuentes de la investigación relacionan a este grupo con los ataques a la comisaría de la policía vasca en Ondarroa y a la Caja Vital en Vitoria. Estos atentados fueron perpetrados en septiembre de 2008 en días consecutivos, en un fin de semana.
Aunque en un principio se consideró que uno de los detenidos, Ibai Iparaguirre Burgoa, también podría estar vinculado con el asesinato de un brigada del Ejército en Santoña (Cantabria), cometido el lunes siguiente de los atentados en Ondarroa y Vitoria, fuentes de la Consejería de Interior han desmentido este extremo.
Iparaguirre, junto a los otros dos detenidos en Ondarroa, formaban el núcleo de este grupo de legales -miembros no fichados de la banda- mientras que los arrestados en Deba y Mutriku (Guipúzcoa) ejercían como colaboradores
La operación ha estado coordinada por el Juzgado Central de Instrucción nº 6 de la Audiencia Nacional, que dirige el magistrado Eloy Velasco. Hasta el momento se ha detenido a cinco personas y se sigue con los registros en varios domicilios e inmuebles.
La Ertzaintza ha practicado, hasta el momento, seis registros en el marco de la operación todavía está previsto que se lleven a cabo otros dos más, según informaron fuentes de la investigación.
Algunos de estos registros se produjeron a primera hora de la mañana en Ondarroa, donde, en presencia de uno de los detenidos, se inspeccionó un piso ubicado en el número 50 de la calle Kaminazpi, donde se incautaron de distinto material que sacaron en tres cajas.
Según se desprende de las investigaciones que han dado origen a esta operación, los detenidos formarían parte de un grupo "legal" de la organización terrorista que, entre otras acciones, podría haber tomado parte en el ataque que sufrió la comisaría de la Ertzaintza en Ondarroa el 21 de septiembre del 2008.
En aquella ocasión, los terroristas colocaron un coche bomba cargado con 100 kilogramos de explosivos frente a las instalaciones del centro policial, contra el que previamente arrojaron un artefacto incendiario para provocar que los ertzainas salieran de su interior y resultaran alcanzados por la explosión.
Acciones de la Ertzaintza
Se trata de la primera operación de la policía autonómica vasca en 2010 y la más importante desde junio de 2009, en la que resultó detenido en Vitoria Jokin Zerain, acusado de participar en la colocación de un artefacto explosivo en un repetidor de telefonía así como de varios actos de violencia callejera perpetrados en las semanas previas en Álava.
Apenas tres meses antes, en marzo, la Ertzaintza detuvo en las horas previas de las elecciones vascas logró apresar en la localidad guipuzcoana de Villabona a Manes Castro Zabaleta, miembro legal (no fichado) de la organización terrorista.
Sin descanso contra ETA
Las detenciones de esta madrugada suponen en todo caso un nuevo capítulo en la lucha contra la banda, que en lo que llevamos de 2010 ya ha tenido que lamentar la detención de cuatro de sus miembros por medio de la Guardia Civil.
Dos de ellos en Clermont-Ferrand el pasado 10 de enero, Eider Uruburu Zabaleta e Iñaki Iribarren Galbete. Ambos figuraban entre los etarras más buscados, según el Ministerio del Interior.
Ese mismo día, la Guardia Civil también interceptaba en Bermillo de Sayago (Zamora) una furgoneta con material para fabricar explosivos. Posteriormente se detuvo, en territorio portugués, a las personas que trataban de llevar el vehículo al país vecino, Iratxe Yáñez de Barron y Garikoitz García Arrieta.
